Heladería Brioscià

Los maestros heladeros de Brioscià trabajan delante de los clientes. De hecho, el laboratorio está separado del resto de la heladería únicamente por un cristal, dando así la oportunidad a los más curiosos de observar los procesos de fabricación.
La bondad artesanal de los productos ofrecidos pasa por la atención a las materias primas, seleccionadas en función de la disponibilidad y la estacionalidad. Para completar su cucurucho, pruebe la «guinda del pastel», es decir, los diferentes moldes disponibles con sabores de chocolate, chocolate blanco, avellana y pistacho. Todas las preparaciones siguen al pie de la letra las recetas tradicionales, pero no falta creatividad e innovación, como el Crudo de Raffadali, un particular chocolate con canela. Gracias a la ausencia de espesantes, incluso los celíacos pueden aprovechar los fantásticos sabores de esta heladería.