El Conjunto Monumental de Santa Clara fue construido en el siglo XIV por orden del rey Roberto de Anjou, dedicado a San Francisco de Asís y a Santa Clara. La estructura incluye una iglesia, el monasterio de las Clarisas y el convento de los Frailes Menores.
La Iglesia de Santa Clara constituye el núcleo central de la ciudadela franciscana.
Tras ser destruida casi en su totalidad por los bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial, hoy se nos muestra en su estilo original, el gótico. En el edificio también encontrarás fragmentos de un fresco de Giotto. Otros artistas del siglo XIV crearon los monumentos funerarios que puedes admirar en el presbiterio.
El Claustro de Maiolicato ha conservado la estructura original del siglo XIV con sus arcos apuntados y pilares de piperno. Su jardín, en cambio, ha sufrido profundos cambios. En el interior del Conjunto Museológico de Santa Clara también se encuentra un belén con pastores de los siglos XVIII y XIX, en el que se representan escenas de la vida de aquellos tiempos.
La Zona Arqueológica alberga las ruinas de un establecimiento termal romano de finales del siglo I d.C. Este es el testimonio más completo de las antiguas Termas de Neapolis.