El Castillo de Peschici se alza sobre una alta roca con vistas al mar. El edificio fue construido alrededor del año 1000 como puesto defensivo contra las incursiones piratas y sarracenas. Con Federico II, el castillo se enriqueció con una torre, la «Rocca Imperiale», mientras que en la época de la regencia española se construyó un muro más protector, denominado «recinto baronial». Hoy es posible visitar este atractivo cultural en el que se conservan artefactos y herramientas antiguas. No puedes irte de este lugar sin haberte asomado a una de las terrazas con vistas a las Islas Tremiti.