Asís

Tras los pasos de San Francisco

Con la amplia y frondosa llanura que se extiende a la sombra del monte Subasio, la mirada dirigida hacia la ciudad de Asís, en el resplandor multicolor del crepúsculo, acompaña el alma de los peregrinos hacia conmovedores paisajes de Umbría. Y es en este silencio lleno de significado que el espíritu de San Francisco de Asís, nacido en este valle de tranquilidad en 1181, se puede sentir con la máxima energía posible. 

Pero no es necesario ser creyente para dejarse envolver por un ambiente maravilloso y disfrutar del hermoso centro histórico, y de la Basílica de San Francesco declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y depositaria de algunas de las obras maestras artísticas italianas más significativas en el mundo. 

Las huellas del santo se pueden ver en los ciclos de frescos realizados por genios del arte como Giotto, Cimabue, Lorenzetti y Simone Martini.

Asís es la ciudad ideal para buscar atmósferas tranquilas que superen el caos. Las piedras rosadas en el laberinto de callejones exhalan el aliento de la profunda carga humana que se cierne sobre esta capital de espiritualidad. 

«La ciudad está transfigurada por la fascinación y el encanto que San Francisco y el antiguo arte de Umbría han transfundido en esta tierra».
Herman Hesse

Desde el 2000 Asís es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.